Mucho se ha dado de hablar en este mes y medio sobre la defensa de los derechos de las personas sin hogar, que dicho sea de paso son los mismos derechos que nos asisten a todos, entre ellos y el que engloba a todos los demás, derecho a una vida digna. Nos preguntamos en qué punto del camino los han perdido, teniendo en cuenta que vivimos en un país desarrollado, en pleno siglo XXI, hasta tal punto de que vivan al margen de la sociedad, desatendidos, olvidados, abandonados.
Parece que no existen instrumentos legales suficientes para proporcionar atención sanitaria obligada a muchas de estas personas, pero sabemos que deben existir unos mínimos que por lo menos eviten que un sin techo con las facultades mentales perturbadas cometa actos criminales en plena calle, en absoluta libertad, tanto más arrastrando unos antecedentes muy marcados, o unos mínimos que impidan que personas mueran en la calle, víctimas del deshaucio y el desamparo. Por tanto, no podemos pensar en un vacío legal en un caso así, ni en otros menos graves; Lo que sí estamos seguros es que no se ha actuado legalmente ni con los medios correctos, y las negligencias cometidas han cobrado la vida de una persona inocente. No sólo se vulneran los derechos de estas personas; también se vulnera el derecho del ciudadano a la protección y a la vida.
Desde esta plataforma seguiremos avanzando, luchando por conseguir atenciones sociales dignas, competentes, propias de un estado de derecho, y contamos y esperamos una implicación generalizada de otros colectivos, sindicatos y partidos políticos en Canarias y fuera de Canarias, en la denuncia de lo que está pasando con las personas sin hogar en nuestra Comunidad Autónoma y las exigencias de mejoras claras.
En tal sentido, estamos en disposición de anunciar que vamos a emprender una propuesta en la que se realizará rondas de contactos entre colectivos sociales, sindicatos y partidos políticos, para recabar los apoyos necesarios que obliguen a nuestras tres Administraciones (CCAA, Cabildos y Ayuntamientos) a firmar un Pacto contra la Exclusión Social en Canarias que contemple a toda Canarias y asegure que se destinan los medios humanos y económicos necesarios para hacer frente a las demandas de los colectivos más desfavorecidos.
-Un pacto que se hace más que necesario –imprescindible e impostergable-, siendo como es Canarias la CCAA con las tasas de paro, paro juvenil, pobreza y fracaso escolar más altos de España, con la Sanidad más precaria, la cesta de la compra más cara y los salarios más bajos, y por tanto, a tenor de estos datos, la más expuesta a que sus ciudadanos se vean avocados a la marginalidad.
-Un pacto que tendría que contar ineludiblemente en su desarrollo con representación notable de los colectivos y ONG que trabajan con personas desfavorecidas (Cáritas, Médicos del Mundo, etc.).
-Un pacto que pasaría por aplicar buena parte de lo que contempla el Plan Concertado de Prestaciones Básicas de Servicios Sociales, que hoy por desgracia es ya papel mojado para nuestras Administraciones.Plan Concertado (ver aquí) -Un pacto que debe pasar por la optimización y la transparencia de los recursos existentes, donde debería ser inasumible que el IMAS de Santa Cruz de Tenerife cuente con 11 millones de euros de presupuesto para este 2011 y la Unidad de Acercamiento (UMA) no cuente ni con médicos ni con psicólogos en plantilla, y la gente se muera en la calle, y el Albergue Municipal esté como está de forma que muchas de las personas que viven en la calle en Santa Cruz no quieran ni oír hablar de ir allí.
-Un pacto que debe tener como referente primero e ineludible el respeto a la dignidad de las personas, más allá de la prestación de un determinado servicio o ayuda.
-Un pacto que debe aprovechar en su aplicación al enorme caudal humano que suponen los muchos estudiantes de Trabajo Social y otras ramas sociosanitarias con disponibilidad y vocación que tenemos en Canarias, que permitiría dotar a los centros y albergues de medios y personal cualificado con un escaso coste.
-Un pacto que debe contemplar unidades de acercamiento que lleven un seguimiento real diario de las situación de las personas que duermen en la calle, con centros o albergues de primera acogida o acogida de urgencia donde hacer una evaluación primera y tratar con ayuda integral a las personas con problemas más graves, para derivarlos con posterioridad a otros recursos de más exigencia donde se facilite su inserción social y laboral.
-Un pacto que debe contemplar el uso y aprovechamiento de algunas de las 100.000 viviendas vacías que hay en Canarias –muchas de ellas producto de la especulación-, para que sean cedidas en donación temporal con ciertos beneficios a sus propietarios, como pisos tutelados donde trabajar en la inserción social de las personas sin hogar, algo que por otra parte ya se hace en otras CCAA de España.
Un pacto que esperamos sea una realidad en Canarias más pronto que tarde y podamos así decir orgullosos que vivimos en una Comunidad donde no se abandona a su suerte a los que se van quedando atrás.
PLATAFORMA POR LA DIGNIDAD DE LAS PERSONAS SIN HOGAR.